jueves, julio 21, 2011

HASTA LA PUERTA DEL CEMENTERIO, SÍ


Borre a Pino, señor editor (?)


Este post llega claramente a destiempo, por múltiples razones que no vienen al caso. Pero lo que queremos traer a colación es que lo esbozado acá y acá entre marzo y abril, no era un delirio: Víctor De Gennaro y Claudio Lozano hicieron un negocio redondísimo como satélites de Proyecto Sur hasta lograr sus objetivos

La egolatría insoportable de Pino Solanas, sus declaraciones fuera de lugar, la pésima lectura del escenario político porteño en particular y del nacional en general tras la elección de 2009, su sobreexposición mediática repleta de sunescándalos, sumado a sus volteretas en el airelo transformaron en alguien no muy diferente a Lilita Carrió. Y puertas adentro de lo que por entonces era Proyecto Sur se evidenciaba mucho malestar. Era previsible que con alguien así a la cabeza ningún proyecto podría arribar a buen puerto. No way, señalaba el cartel (?).

Pero los muchachos no se quedaron quietos. En realidad nunca lo estuvieron. La disputa por poder en política es por lugares, vaya novedad. Sin temor a equivocarnos y a la luz de los hechos, a Pino Solanas se lo fumaron en pipa. Lo acompañaron a la puerta del cementerio, se dieron vuelta y rajaron matándose de risa. Solanas apenas sacó poco más de la mitad de los votos que en 2009, quedó fuera de carrera para octubre, se quedó sin su gente más visible y sometió al ridículo a Alcira Argumedo con su candidatura a presidente. Va rumbo a convertirse en un cadáver político, que encima no se rinde y anuncia candidaturas para 2013 y 2015.

El resurgir de De Gennaro tiene que ver con la necesidad imperiosa de pelear por algún cetro de poder, más aún después del mamarracho electoral que enchastró a la CTA. El dirigente social apuntó a encabezar una lista de diputados nacionales y lo consiguió: su "aspiración" a gobernador además de ser una maniobra distractiva y de posicionamiento iba a ser meramente testimonial, está claro. Claudio Lozano ("el que no medía", modo Pino on) operó de la misma manera y se ubicó como primer diputado por la Capital. Después quedan en el aire las declaraciones altisonantes, el pase de facturas sobre quién es el responsable de tal ruptura, quién es más progre. En tanto Victoria Donda, Humberto Tumini, Jorge Ceballos, más la flamante adquisición del hombre estrella del PCR, Juan Carlos Alderete, también pelearán por formar parte del eterno drugstore legislativo tan característico de cierta progresía. Todo, bajo el ala protectora de Hermes Binner y de Margarita Stolbizer.

Lo bueno es que como todo armado de 100% de pureza ideológica, todo esto fue posible gracias al consenso, la participación horizontal de los militantes y cabildos abiertos (?).

Y para empezar, arrancaron bárbaro.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gran artículo. Muy buen análisis, y bien sarcástico como nos gusta a nosotros.
Si lograras analizar con la misma frialdad y crítica lo que hacen desde Olivos, serías mejor que Wainfeld.

Beso

Lupa